sábado, agosto 22, 2009

 

SIN...gracia.

Un te sin teína ¿qué es?, y un café descafeínado ¿sigue siendo café?, la cerveza sin alcohol no sabe igual que la cerveza con alcohol y la Coca-cola sin cafeína y además "light" es casi agua sucia. Son dudas y realidades que nos asaltan en nuestro día a día, ¿qué sabemos? Empecemos diciendo que la teína y la cafeína son la misma molécula. La cafeína fue aislada en el año 1819, en aquella época se pensaba que el té contenía una sustancia parecida pero diferente: la teína. Análisis posteriores revelaron que eran la misma sustancia.
La cafeína es una molécula que se encuentra naturalmente en el café, el té, el cacao, el guaraná y la yerba mate. La concentración varía mucho según el tipo de café o té y la manera de prepararlo. Tanto el café como el té tiene muchas más moléculas que la cafeína y todas ellas interactúan entre sí y compensan, atenúan o matizan sus efectos. El té tiene componentes que hacen que la cafeína se absorba más lentamente por el cuerpo humano comparado con el café, por eso el té excita menos pero mantiene sus efectos más tiempo.
El café descafeinado tiene que pasar por un proceso para eliminar la cafeína. Durante este proceso se usan sustancias que ayudan a extraer la cafeína "sin eliminar todo el sabor". Algunas de estas sustancias son consideradas carcinogénicas y pueden causar enfermedades. Tiene un coste de produccion más elevado ya que eliminar la cafeína es un proceso intenso en mano de obra. Un café se le considera descafeinado cuando se ha elimnado en torno al 97% de la cafeína. La cafeína no desaparece al 100%. Durante el proceso de descafeinización, se eliminan también los flavonoides, sustancias que evitan la acumulación de placas de colesterol en las arterias. Si tienes problemas con el colesterol tenlo en cuenta a la hora de tomar café descafeinado. La única planta del mundo que produce granos de café sin cafeína tiene un nombrecito curioso: Coffea charrieriana. Procede de Camerún y su peculiar característica podría posibilitar que se pudiese producir café descafeinado de modo totalmente natural.
Podemos conseguir, de forma casera un té con menor acción estimulante de dos maneras:
1.-Dejamos reposar la infusión entre cuatro y diez minutos. Conseguiremos un té menos estimulante, pero de sabor más fuerte y astringente.
2.-Hacemos una primera infusión de pocos segundos, para que suelte la mayoría de la teína el té y tiramos esa infusión. Realizamos una segunda infusión con las mismas hojas. Conseguiremos un té con menor contenido en teína.
¿Son lo mismo o no son lo mismo? Yo diría que no son lo mismo pero para gustos los colores. Ahí no queda la cosa, como dice una banda de punk de Pamplona, Lendakaris Muertos, en una letra que viene muy al caso para lo que quiero explicar: "Cerveza sin alcohol,Café sin cafeína, Grasa sin grasa, Sin hueso el chuletón, Drogatas contra la droga, Adelgazo papeando una hamburguesa vegetal, Sin-sin, cero-cero, Sube el precio del dinero, Sin-sin, cero-cero, Somos tontos o no lo entiendo, Cerveza sin alcohol, Café sin cafeína, Grasa sin grasa, Sin hueso el chuletón, Los negritos se mueren de hambre, y tú estás a régimen, cabrón".
La cerveza es la bebida que se obtiene de la fermentación alcohólica -mediante levaduras seleccionadas- de un mosto de malta de cebada, sólo o mezclado con otros cereales, al que se le añade lúpulo o sus derivados, y sometido a un proceso de cocción. Se consideran cervezas sin alcohol aquellas cuya graduación alcohólica sea inferior al 1% en volumen. Las tradicionales tiene entre 4 y 5 grados de alcohol (4%-5%/vol). Para elaborar la cerveza sin alcohol, los fabricantes parten de la cerveza tradicional, a la que se elimina el alcohol una vez formado éste (destilación y ultrafiltración), o mediante procesos específicos que reducen la formación del alcohol en la fermentación, utilizando levaduras especiales o disminuyendo el contenido en mosto original. La cerveza sin alcohol aporta menos calorías que la tradicional, debido a la reducción del contenido en alcohol. Un botellín de 250 ml de cerveza "sin" tiene entre 37 y 50 calorías, frente a las 115 calorías de las tradicionales. Una cerveza 0,0 es la que mejor asegura la práctica ausencia de alcohol en su composición, pero todavía hay más, las cervezas "light", que además de reducir su aporte calórico rebajan también su graduación alcohólica y se quedan en una posición intermedia entre las "sin" y las normales.

Cada vez hay más productos sin azúcar y bajos en carbohidratos, los conocidos "light". Se ha creado una imagen positiva de los productos "light" y la demanda de alimentos elaborados con edulcorantes es cada vez más elevada entre la población sana con el fin de reducir la ingesta de azúcares en la dieta y evitar así el aumento de peso. Actualmente, cualquier marca tiene su línea de productos "light" o sin azúcar. Sus envases se adornan, por lo general, con estilizadas figuras humanas y todas las promesas de salud, belleza y buen tipo hacen que su precio sea bastante superior al de otros productos similares que no se presentan con el irresistible reclamo de “light”. Las características que debe reunir un producto “light” varían mucho, de acuerdo a la legislación de cada país, pero en términos generales estos alimentos deben contener menos calorías, grasas, sodio y azúcares que sus equivalentes no “light". Los alimentos light aportan un 30 por ciento menos de energía, pero su aporte sigue siendo elevado en el caso de mayonesas, margarinas, quesos cremosos, etc. Por ello, es necesario advertir que los alimentos "light" también engordan, por lo que se recomienda comprobar el etiquetado al elegir los alimentos menos calóricos y de este modo evitar errores. Porque según Europa Press más de la tercera parte de los alimentos tipo "light" que se venden en los comercios españoles no pueden ser considerados como tales, porque la reducción del aporte calórico respecto de su alimento de referencia convencional no alcanza el 30% que establece la única recomendación en vigor al respecto para los alimentos light en España, cuyo seguimiento no es obligatorio para los fabricantes. Debemos desterrar la falsa creencia de que los productos "light" no engordan. Cualquier alimento que contenga macronutrientes (proteínas, grasas o hidratos de carbono) o alcohol en su composición, aporta energía y contribuye a la ingesta calórica total de la dieta.
Desde el punto de vista dietético y nutricional nada desaconseja llevar una dieta basada en alimentos menos grasientos y con menos azúcares, pero para ello no es indispensable recurrir a los alimentos "light". Comiendo menos cantidad de algunos alimentos y cocinando de la manera adecuada, se consigue reducir la ingesta de grasas y de azúcares sin necesidad de optar por los alimentos light, que no resultan tan apetecibles como los alimentos a los que pretenden imitar. Tenemos que cambiar la mentalidad y los hábitos, sustituir la carne y los huevos por pescado al menos tres o cuatro veces por semana. Comer cantidad suficiente de frutas y verduras. Tomar legumbres, pastas y arroz, de 2 a 4 veces por semana. Evitar chucherías, snacks, refrescos azucarados, bebidas alcohólicas. Beber mucha agua. Hacer ejercicio.

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